El TSJ ratifica la sentencia a una arandina por apropiación indebida de 25.500 euros de un anciano

Redacción
La Sala de lo Civil y Penal del TSJCyL ha desestimado el recurso interpuesto por una mujer de Aranda de Duero acusada de apropiación indebida por quedarse con 25.500 euros de una señor mayor abusando de su confianza. El Tribunal considera probado, y por lo tanto no acepta el recurso interpuesto por la defensa, que la acusada de ganó la confianza de un hombre de 90 años para conseguir ser autorizada en una cuenta de la Caja Rural de la que era titular. “Aprovechándose de esa condición de autorizada y con la finalidad de quedarse con parte del dinero de la cuenta de la víctima, la acusada realizó siete extracciones en la entidad Caja Rural de Aranda de Duero”, se expresa en la sentencia. Dichas extracciones se realizaron entre abril de 2019 hasta febrero de 2020 por importes de entre 1.000 € y 11.500€ llegando a un total de 25.500€.
En la sentencia se especifica que al descubrir estas operaciones, el anciano, que falleció en en abril de 2020, acudió a un abogado y decidió enviar una carta con fecha 17 de febrero de 2020 al Director de la entidad bancaria en la que le pedía copia de dichas operaciones e igualmente solicitaba que se procediese a cancelar la condición de autorizada de esta mujer de su cuenta. Dicha carta tuvo entrada en la oficina de Caja Rural de Aranda de Duero el 20 de enero de 2020.
La defensa alega en su recurso que la representada era vista como una hija para la difunta víctima y que en muchas ocasiones, las extracciones se hicieron con el anciano, algo que no se puede comprobar ya que la firma era la de la acusada. La sentencia, explica que “se pone de manifiesto que la acusada se quedó ilegítimamente con el dinero puesto que en caso contrario, no se comprenden la carta remitida con fecha 10 de enero a la Caja Rural y la carta dirigida a la mujer reclamándole el dinero indebidamente extraído, ni que instituyese herederos de sus bienes con fecha 10 de enero de 2020 encontrándose en la plenitud de facultades mentales”, y continúa: “Otro indicio a favor de esta tesis resulta que cuando la acusada se enteró de que la víctima había cambiado su testamento, de lo que tuvo constancia cuando le visitó en el hospital, y ella no resultaba favorecida, decidió sacar el dinero que le quedaba“.
Por todo ello, el Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León mantiene la pena de un año de prisión más el pago de los 25.500 euros a los herederos, además de las costas procesales. Sobre esta sentencia cabe recurso de casación.